(Lee la entrevista original en ChessLive.com)
Hace una semana aproximadamente conocimos de manera casual un proyecto ajedrecístico llamado (Ajedrez Sin Fronteras). En seguida nos llamó la atención al ver las iniciativas que ponían en marcha. Un claro ejemplo de que el ajedrez no solo es un deporte, sino que puede ser una gran herramienta para combatir la pobreza y ayudar a otras personas. En Chesslive.com, hemos tenido el placer y el honor de entrevistar al Sr. Alvaro van den Brule, responsable del proyecto.
Ajedrez Sin Fronteras: ajedrez contra la pobreza
¿Qué es ajedrez sin fronteras (ASF)?
Básicamente es una apuesta por la libertad de pensamiento sin ánimo de afrentar políticamente la expresión. Es al tiempo, una apuesta por el arte y la ciencia implícitos en esta milenaria disciplina. Se busca que los niños y niñas , chicos y chicas , presidiarios y presidiarias , huérfanos de guerra, niños soldado o refugiados, puedan tener un espacio de conocimiento e intimidad en el que gestionar sus conflictos.
¿Quién está detrás del proyecto?
A día de hoy, idealistas y creyentes en la Utopía de un mundo mejor. Hay parados y gente solvente que viajan apoyándose los unos en los otros e impartiendo programas de enseñanza del ajedrez tanto básico como avanzado. Ocasionalmente algunos de nuestros mecenas nos acompaña para mostrarles en que invertimos el dinero confiado por ellos al tiempo que les proporcionamos una fuerte inmersión de enseñanza.
Partida de ajedrez dentro de uno de los campamentos, de la mano de uno de los colaboradores de Ajedrez Sin Fronteras. © ASF
¿A quién se dirige y cuál es su objetivo?
Básicamente nos dirigimos a aquellos colectivos de desheredados que viven situaciones extremas y que creemos poder mejorarlas a través de esta herramienta de felicidad y autoconocimiento. Se puede entender por ejemplo, que durante los meses de monzón, es mejor jugar al ajedrez lo más confortablemente posible que darle patadas a un balón bajo una cortina de agua. O impedir depresiones en cárceles, o evitar el tedio eterno de los campamentos de refugiados.
Ajedrez sin Fronteras en uno de los campamentos. © ASF
¿Qué papel juega la Fundación Vicente Ferrer en este proyecto?
Nos dieron la oportunidad de montar una escuela en India y fue una experiencia (todavía abierta), que nos procuró una enorme satisfacción a todas las partes. Más de tres centenares de muchachos sin vista o con serias limitaciones de audición nos recibieron con un cariño enorme durante tres semanas en una de las mejores experiencias que hemos tenido. La Fundación Vicente Ferrer es una de las instituciones más modélicas que he visto durante los viajes de AsF –Chess without Borders. Me impresionó su eficiencia, organización y la atencion y acogida que nos dispensaron. Les estamos enormemente agradecidos.
Organizando las clases de Ajedrez sin Fronteras en un colegio. © ASF
¿De qué manera el ajedrez puede ayudar a combatir la pobreza y a ayudar a otras personas?
Entendemos que con una preparación adecuada y tras meses de entrenamiento, los podemos convertir en monitores y más tarde en profesores titulados que a su vez podrán esparcir esa semilla de diversión y conocimiento al tiempo que desarrollar un trabajo honrado y tener ingresos y expectativas de futuro donde lo habitual es que estas estén bloqueadas o sean inexistentes.
El ajedrez es en muchos casos la única esperanza para miles de niños y niñas en el mundo. © ASF
¿Qué es lo más bonito/reconfortante que os ha pasado en ASF?
Hemos enseñado en los monasterios de Meteora en Grecia, a refugiados en Jordania y Argelia, en el macroorfanato del Padre Angel Olaran en Wkro- Etiopia, en cárceles superpobladas de Eritrea, y así hasta once escuelas. Todas sin excepción nos enseñaron que con buena voluntad el ser humano se hermana con facilidad venciendo las reticencias o resistencias que generan las desconfianzas seculares normalmente basadas en estereotipos.
Partidas de ajedrez entre algunos responsables de Ajedrez sin Fronteras y ajedrecistas locales. © ASF
¿Cuáles son vuestros planes para el 2015?
Tenemos dos proyectos solamente, ya que nuestros recursos son muy limitados para este año. Uno, es en una escuela de huérfanos en Senegal para Semana Santa y el otro, es la instalación de un taller para la construcción de ajedreces con componentes de reciclaje (en una cárcel de Etiopia) para poder procurarles a los presos ingresos a través de las ventas de estos ajedreces artesanales.
Muchísimas gracias por sus respuestas y por su tiempo Sr. Álvaro y desde Chesslive.com les deseamos lo mejor.
Sr. Álvaro van den Brule.
