Ajedrez de Capablanca y piezas mágicas

Hoy hablaremos sobre las piezas mágicas de ajedrez. A lo largo de la historia, algunos seres humanos desbordantes de creatividad han dado en inventar hasta cientos de variantes del juego del ajedrez. De hecho, el ajedrez que conocemos en nuestra cultura, no es más que una variante de otros juegos similares más antiguos, como el shatranj y el chaturanga. Estos, a su vez, serían variantes de juegos más antiguos aún, porque así es como progresa el conocimiento humano.

Ajedrez de Capablanca

Hace poco estuvimos hablando de una interesante variante inventada por Bobby Fischer llamada Ajedrez 960. Y hoy queríamos llamar brevemente la atención sobre una variante inventada por el campeón cubano José Raúl Capablanca, llamada Ajedrez de Capablanca. El nombre es poco original y la idea de fondo parecido, porque con anterioridad ya existían variantes en tableros de 8×10 con piezas mágicas.

Ajedrez Capablanca
http://www.birdgeo.com/chess.htm

La idea de fondo de estos ajedreces es crear un juego más complejo que, al ser más variado (más escaques y más piezas, con nuevas funciones), hagan más difícil llegar a un final sin tablas, que es un resultado muy habitual entre jugadores de alto nivel.

Capablanca, como sus antecesores Henry Bird y Pietro Carrera (cuyas variantes también están documentadas), introdujo dos piezas mágicas, además de añadir 2 peones para cubrir las dos nuevas columnas:

  • El canciller, que puede mover como una torre o un caballo, según le apetezca.
  • El arzobispo, que puede mover como alfil o caballo.

Esta variante gozó de cierta popularidad y tuvo algún eco también gracias a partidas que jugó el propio Capablanca con Lasker y contra el húngaro Maróczy (el del lazo o nudo Maróczy que se juega contra la defensa siciliana).

Piezas mágicas

En cualquier caso, nos da una excusa para tocar el asunto de las piezas mágicas. Estas son piezas que se emplean en juegos de ajedrez no ortodoxo, o en algunos problemas de ajedrez (no ortodoxo, evidentemente). Habitualmente, sus movimientos están basados en las piezas normales de ajedrez, como las que hemos visto del canciller y el arzobispo inventadas por Capablanca.

Hay algunas muy poderosas. Por ejemplo, hay otras piezas también llamadas arzobispo, utilizadas en distintos juegos. Una de ellas mueve como un alfil, pero puede rebotar en los extremos del tablero todas las veces que quiera, como una bola de billar.

Y otras tienen propiedades mucho más extrañas, incluso “mágicas”. Por ejemplo, hay una pieza muy curiosa llamada camaleón, empleada en una variante del ajedrez llamada Ultima, inventada por Robert Abbott, un famoso inventor de juegos americano. Esta pieza mueve como una Dama, pero captura a las piezas como ellas capturan.

En este diagrama, por ejemplo, siendo el camaleón el alfil negro, podría mover a las casillas verdes, pero sólo capturar al caballo en b3:

Os dejamos un interesante enlace a la Piezoclopedia, donde se recoge un listado bastante grande de piezas mágicas, su génesis y uso. Aquí podréis encontrar unicornios, conejos, y al mismísimo Alí Babá:

http://www.chessvariants.com/index/mainquery.php?type=Piececlopedia